El no puede permanecer en el aula, no puede pertenecer, no puede permitirse ser alojado, quizá porque nunca lo fue. Hubo un padre que ejerció violencia sobre su familia. El punto límite fue cuando intentó matar a su mamá, y él recuerda ese día, recuerda el alivio que sintió cuando los policias se lo llevaron. "Mi papá era un mounstruo" dice. Durante las noches no puede dormir tranquilo, ha observado cómo un animal negro entra por la ventana del baño y lo acecha mientras él duerme en un colchón, en el suelo de la cocina. Lo abrazo y le digo que quizá son pesadillas que parecen reales, y él me dice "y si mi papá, un día de éstos, regresa?" La fragilidad de un niño, la fragilidad de la salud mental, la fortaleza para contarlo y querer ser la mejor versión, el largo camino de superar para llegar a ser, una construcción que gira entre la inocencia, la rebeldía, la picardía y la búsqueda permanente de ser mirado, cuidado y amado.
Blog con los relatos presentados al concurso convocado por la Plataforma “Salud Mental y Cultura”, integrada por la Unidad de Salud Mental Comunitaria del Hospital de Los Arcos-Mar Menor, las concejalías de cultura de los municipios de Los Alcázares, San Javier, San Pedro del Pinatar y Torre Pacheco, las asociaciones AFEMAR, AIKE Mar Menor y LAEC, y la Fundación entorno Slow-Proyecto Neurocultura de Torrepacheco.
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